domingo, 6 de noviembre de 2011

Capítulo 6

¿Que querrá decir Darío con que no seré para él?
-¿No seré para él? ¿Y tú que sabes?-le dije
-Porque no te veo yo con él, digamos que es como un "mujeriego". Sin embargo, yo soy tu estilo, soy un chico de esos que te van.
-Osea que se lía con todas. ¿Tú mi estilo? No te flipes.
-¿No te caigo bien? Bah esa es la primera impresión. Cuando me conozcas mejor no pensarás nada malo de mi. Además tu mirada te delata que soy de tu clase.
-Si me caes bien, pero te estoy diciendo que no te flipes. ¿Mi mirada me delata?
-Eso ya es otra cosa. =) Si. Tu mirada te delata. Tienes una mirada preciosa, que transmite mucho. No hace falta palabras, ni gestos. Con tan solo una mirada lo demuestras todo. Y ahora demuestras que te sientes un poco incómoda en esta fiesta, miedo, desilusionada, y a la vez como si te hubiera sorprendido algo, como si no hubieses tenido o fijado en alguien y ahora pum. Y también veo, a través de esa mirada, que tienes un corazón que no te cabe en el pecho.
-......... ¿Cómo as sabido todo eso?
-Lo transmiten tus ojos. Nunca había visto unos así.
-Gracias..... Pues ya los has visto. jajajaja. Bueno bye me voy a mi casa.
-¡No! No te vallas. ¿Cómo puedes estar aburrida en esta fiesta que está todo alegre? He visto fiestas mas aburridas. Mira vamos a hablar y a conocernos mejor o a bailar si quieres. ¿Quieres bailar?
Creo que no es un chulo como los demás. De momento. No me puedo fiar. Pero bueno es un chico que esta bastante bien y por lo que se ve es majo y simpático y no va a lo que va. 
-Tengo ganas de bailar. ¿Bailamos?
-¿No te vas? Bien. Venga bailemos.
Nos pasamos casi toda la noche bailando, riéndonos, hablando.... Fue una noche mágica.
Las seis de la madrugada. Pufff se me a pasado la hora.
-Tengo que irme ya.
-Te llevo yo si quieres.
-Pues como no sea a caballito jajajaja 
-Pues si quieres también jajaja. Tengo el coche a la entrada.
Montarme en su coche. No sé. Le conozco de una noche y no me subo en coches de "desconocidos". Pero el no tiene esas intenciones se lo e visto en su mirada, en sus gestos, en su forma de expresarse.
-Vale.
-¿Dónde está tu casa?-dijo montándose en el coche.
-Todo recto. Y en la rotonda giras hacia la izquierda. Sigues recto y a la derecha.
-Oks.
En menos de cinco minutos ya estaba en mi casa. Sabía que era de confiar.
-¡Oye guapa!-dijo cuando estaba abriendo la puerta de mi casa.
-Dime. 
-¿A qué instituto vas?
-Al de Tlalnepantla. Sc. ¿Por?
-¡Vas al mismo que yo! Mañana nos veremos entonces.
-Vale. -Le dije metiéndome ya a mi casa. Miré por la venta y él ya se iba. ¡Mierda! Se me ha olvidado la chaqueta en su coche. Pufff como siempre estoy en las nubes y se me olvida cualquier cosa. Mañana se la pido. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario